Los concejales de la capital volverán este jueves al recinto de sesiones para subsanar un error. Sucede que en una reunión parlamentaria realizada en octubre del año pasado, los ediles sancionaron una norma que prohibe que la titularidad de las licencias sean compartidas. Pero se olvidaron de un importante detalle: el caso de los cónyuges, donde la ley ya establece que los matrimonios comparten el 50% de los bienes gananciales.
Para subsanar este inconveniente legal, los representantes vecinales de la capital introducirán los cambios necesarios para el caso de los cónyuges y, además, ampliarán el plazo perentorio para que la totalidad de los permisionarios se pueden adecuar a esta nueva disposición.
El concejal alperovichista y presidente de la comisión de Transporte, Esteban Dumit, explicó que los cambios fueron consensuados con sus pares que integran el grupo de trabajo y con todas las organizaciones de taxistas.
"Nosotros aprobamos el año pasado una ordenanza que establecía que los permisionarios debían ser titulares del 100% de la licencia. Antes, por ejemplo, tres personas podían ser los dueños. Al realizar los cambios no contemplamos la situación de los matrimonios. Así que ahora estamos dispuestos a modificar esa situación", señaló Dumit.
La representante de la Coalición Cívica-ARI en el Concejo Deliberante, Sandra Manzone, sostuvo que los taxistas que debían realizar los cambios no contaban con el tiempo suficiente para hacerlo. "Hemos decidido concederles una prórroga y postergar el vencimiento de la revisión técnica de los autos (VTV) hasta el 15 de julio", explicó Manzone.
Mayor protección
Si bien todavía no será tratado en sesión, concejal bussista, Claudio Viña, presentó un proyecto de ordenanza para obligar a todos los propietarios de taxis a que coloquen, entre el conductor y los asientos traseros, una mampara antivandálica de seguridad.
"Este elemento, ya exigido o en vías de implementación en ciudades como Rosario, Mendoza y Neuquén, brinda una separación entre el chofer y los pasajeros ubicados en el asiento trasero. Su material, liviano, transparente y muy seguro, impide cualquier acceso hacia la persona que maneja el vehículo, contando con ranuras para escuchar indicaciones y para poder realizar el pago del servicio", explicó el edil opositor. "El proyecto prevé que el Ejecutivo municipal, como ocurre en alguna de las ciudades mencionadas, se haga cargo del 50% del costo de instalación a cambio de publicidad estática en el vehículo", consignó Viña.